Katia Chornik Guillén | Venezuela
¿CÓMO TE COMUNICABAS CON TU FAMILIA?
La comunicación con la familia era esporádica, principalmente a través de cartas que tardaban muchos meses en llegar. Ocasionalmente viajaba algún conocido a quien se le encargaba que llevara o trajera encargos por mano. En esos casos, mis padres y yo grabábamos un casete para nuestros familiares. Les contábamos nuestras últimas novedades y preparábamos algo de música. También grabábamos a nuestro canario cantando. Me acuerdo que preparábamos estas grabaciones con esmero, las hacíamos y rehacíamos varias veces. Raramente hablábamos por teléfono: era demasiado costoso así es que había que limitarse a un par de minutos por persona. Qué alegría era recibir cartas y grabaciones de nuestros familiares, especialmente de mis primos a quien verdaderamente no conocí hasta nuestra vuelta a Chile, cuando tenía doce años.